Determinadas anomalías o problemas estéticos pueden provocar muchos complejos e inseguridades. Incluso traumas que condicionan la vida social y sentimental de las personas que los padecen. Tal es el caso de las llamadas orejas de soplillo, conocidas también como orejas prominentes o despegadas.

De hecho, cada vez son más las madres y padres de niños con orejas de soplillo que quieren tomar cartas en el asunto lo antes posible: para evitar así futuros problemas de autoestima en sus hijos.

Esto no quiere decir, en absoluto, que solo sea un problema que afecta a la infancia. Existen muchos adultos, tanto mujeres como hombres, que acuden a nuestra consulta deseando encontrar una solución a un problema que les lleva preocupando o generando malestar prácticamente toda su vida.

¿Crees que podría ser tu caso? Si es así, tenemos buenas noticias para ti. Las orejas de soplillo pueden corregirse para siempre con una sencilla intervención: sin molestias incómodas y con una recuperación postoperatoria rápida, que te permitirá retomar tu vida normal enseguida.

No te pierdas este artículo en el que te contamos todo lo que necesitas saber sobre este problema estético y su tratamiento más efectivo.

En este post trataremos los siguientes temas

¿Qué son las orejas de soplillo y qué causa su aparición?

Las orejas de soplillo es el nombre popular que reciben las orejas que están excesivamente despegadas de la cabeza del paciente. Las personas que sufren esta anomalía suelen tener unos pabellones auriculares grandes y con demasiada proyección.

Este problema no aparece de la noche a la mañana, ni es una secuela de algún tipo de enfermedad, sino que se trata de una malformación congénita (de nacimiento) más común de lo que podríamos pensar.

Si bien las orejas prominentes no son una patología que afecte a la salud, tampoco pueden considerarse meramente un problema estético.

Las personas que sufren esta malformación desgraciadamente pueden ser, tanto en la infancia como en la adolescencia y en la edad adulta, objetos de burlas y mofas crueles. Y todo ello influye muy negativamente en su salud psicológica y en la construcción de una autoestima saludable.

¿Existe una solución casera para corregir las orejas de soplillo?

Empecemos siendo claros: no, los remedios caseros no pueden corregir las orejas de soplillo.

Seguro que has visto mil productos (muchos de ellos de dudosa procedencia) que prometen corregir las orejas de soplillo: pegamentos, adhesivos, esparadrapo, prótesis de silicona…

Si bien es cierto que ciertas recomendaciones o remedios pueden ayudarnos a no empeorar la situación, como por ejemplo dormir en una postura correcta (especialmente en el caso de los bebés, que tienen todavía un cartílago en proceso de desarrollo), no se trata de fórmulas milagrosas.

Estas soluciones caseras pueden disimular el problema, pero no acabar con él de forma definitiva. De hecho, ni siquiera todas las orejas de soplillo se manifiestan de la misma forma, únicamente más despegadas del rostro: existen muchos casos en los que también hay presencia de otro tipo de anomalías, como ocurre con las orejas constreñidas.

La única solución definitiva, eficaz y poco invasiva que existe, siempre en manos de cirujanos plásticos con experiencia, es una operación denominada otoplastia.

Otoplastia: la operación que corrige las orejas de soplillo para siempre

La otoplastia es la intervención estética que permite solucionar las anomalías del pabellón auricular y que puede, por lo tanto, corregir definitivamente unas orejas de soplillo: proporcionando un tamaño equilibrado y una proyección natural respecto al rostro del paciente.

Mediante esta cirugía se pueden recolocar unas orejas despegadas e incluso mejorar su proporción para que no llamen demasiado la atención y se respete la armonía de las facciones.

La operación de otoplastia es muy sencilla, siempre y cuando estemos en las mejores manos. En general, consiste en una pequeña incisión en la parte posterior de la oreja y en la remodelación de la estructura cartilaginosa. La cicatrices son prácticamente inapreciables, y se disimulan totalmente al situarse detrás de la oreja.

En la mayoría de las ocasiones, cuando tratamos a pacientes adultos, llevamos a cabo la intervención solamente con anestesia local y sedación: pueden volver a su casa después de la operación y retomar enseguida su actividad laboral. A partir del tercer o cuarto día, se puede hacer vida normal con tranquilidad, siguiendo las indicaciones de la doctora y acudiendo a las revisiones cuando toque.

Las leves molestias del posoperatorio son totalmente controlables gracias a la medicación pautada. La malla elástica postoperatoria debe llevarse durante 3 o 4 días seguidos, y luego mantenerse una semana aproximadamente solo para dormir. Así protegeremos las orejas para que se adapten perfectamente a su nueva forma, y la recuperación será mucho más rápida.

¿Desde qué edad se pueden corregir las orejas de soplillo con cirugía?

Corregir las orejas de soplillo en niños o incluso en bebés es mucho más común de lo que podrías pensar. Cada vez son más los padres que prefieren intervenir a sus hijos lo antes posible para evitarles sufrimientos innecesarios en el colegio o en su posterior vida adulta.

Casi siempre preferimos esperar a los 6 años de edad para corregir las orejas despegadas de un niño con cirugía. El motivo principal (además de la madurez del niño), es que justo en ese momento se considera que el pabellón auricular ya se ha desarrollado lo suficiente y, lo que es igual de importante, su cara y su cabeza habrán ido equilibrándose. Así confirmaremos la gravedad del problema y aportaremos la mejor solución.

Las orejas de soplillo no solo son un problema de bebés o niños

Como anticipábamos, muchos adultos sufren a diario e intentan disimular sin éxito unas orejas demasiado prominentes y despegadas.

¿Te imaginas volver a llevar coleta o un recogido sin sufrir por tus orejas?

Deshacernos de complejos y vivir nuestra vida con plenitud, luciendo nuestro rostro y nuestro cuerpo con orgullo, es una de las bases sobre las que se sustenta la cirugía plástica, estética y reparadora. No lo olvides: estamos aquí para ayudarte a sentirte mejor en tu piel, potenciar tus atributos y tener una mejor calidad de vida.

¿Necesitas corregir, de una vez por todas, las orejas de soplillo? ¿Quieres confirmar que esta intervención es para ti? Contacta con la Dra. Castro: ella analizará tu caso al detalle, resolverá todas las dudas que puedas tener y te acompañará en todo el proceso.